La batería es un acumulador de energía cuya función principal es poner en
marcha el motor del vehículo.
La acumulación de energía se realiza por medio de
un proceso químico entre dos placas de plomo y un líquido llamado electrolito
formado por agua y ácido sulfúrico.
En baterías con mantenimiento es importante comprobar el nivel del electrolito
en cada uno de los seis vasos, debe estar un centímetro por encima de la parte
más alta de las placas. En caso contrario será necesario añadir agua destilada
hasta alcanzar el nivel correcto.
Es muy importante no utilizar agua de la
canilla porque contiene minerales que interfieren en las reacciones químicas y
dañan a las placas.
No es necesario añadir ácido porque no se evapora como el agua, sino que
permanece en el interior del vaso.
Solamente será necesario añadir ácido si se ha producido un derrame del
electrolito de la batería, siempre controlando el proceso con el densímetro para
que no se altere su capacidad.
La reacción química que se produce en la batería genera energía eléctrica y
además es reversible. Alimentando a la batería con una determinada tensión se
consigue recombinar los elementos químicos para regenerar la carga de la
batería.
Todo este proceso de carga y descarga origina un desgaste de las placas
internas, desgaste que se acelera si el nivel del electrolito desciende por
debajo del mínimo, se utiliza la batería con poca carga o se realizan procesos
de carga muy rápidos.
El desgaste de las placas crea desprendimiento de material que se deposita en la
parte inferior del vaso originando un cortocircuito entre las placas.
Esta
avería se conoce como vaso comunicado y se detecta al aparecer burbujas en el
vaso cuando se somete la batería a un esfuerzo prolongado (arranque del
vehículo).
El cortocircuito entre las placas origina la rápida descarga de la
batería que puede suceder en muy pocos minutos.
DISPONEMOS DE DISPOSITIVO ELECTRÓNICO DE CONTROL DE CARGA.
Para mantener una batería en buen estado es necesario evitar que el nivel del
electrolito descienda por debajo del mínimo. Realizar una carga si presenta
síntomas de falta de energía en el momento del arranque del motor. Una batería
pierde un 0.24% de su carga cada día que no se pone en marcha el vehículo.
Evitar las cargas rápidas, no debiendo utilizar intensidades mayores del 10% de
la capacidad de la batería. Una batería de 12 voltios y 75 Ah deberá cargase a
una intensidad máxima de 7.5 amperios.
Otro punto importante en el mantenimiento de la batería consiste en el estado de
los bornes de conexión con la instalación eléctrica.
Los vapores de ácido
sulfúrico pueden llegar hasta los bornes y terminales creando una capa de
sedimentos que atacan al material de los mismos.
Para eliminar esta capa de
sedimentos se recomienda utilizar solamente agua en abundancia.
Para prevenir
estos depósitos de sulfato, aplicar en los bornes y terminales algún tipo de
grasa o vaselina.
Habrá que tener especial precaución con el agua que cae en el compartimento del motor porque puede depositarse en algún hueco y atacar a la
chapa del vehículo.
La unión entre los bornes de la batería y los conectores de la instalación
eléctrica del vehículo debe mantenerse lo más limpia posible para evitar que
aparezca resistencia entre ellos. Un pequeño valor de resistencia origina un
peor arranque del vehículo y un descenso de la eficacia del sistema de alumbrado
y es la causa de importantes fallos en los sistemas electrónicos del vehículo.
Las baterías sin mantenimiento no se pueden abrir fácilmente porque el proceso
químico no es idéntico al de las baterías con mantenimiento. El agua necesaria
para el proceso químico es generada con los elementos químicos de las placas.
Por este motivo los vasos no necesitan agua y la batería no debe ser abierta.
El mantenimiento de estas baterías se reduce a la comprobación del estado de sus
bornes y a evitar su carga rápida.
En caso de no utilizar el vehículo durante un largo periodo de tiempo se
recomienda desmontar la batería y realizar cargas periódicas (una cada mes) para
evitar que se descargue completamente. Una descarga completa de la batería
origina un rápido deterioro de las placas, reduciendo su vida útil.